Limbo se había ido, aunque podía verlo en la cama recostado, ella ya se había cansado de preguntar, simplemente había que esperar el momento en el que se quebrara frente a ella y ambos creerían que jamas iba a volver a escapar a aquel purgatorio, aun así , volvería a pasar , como los días , como la muerte , como los nacimientos.
A veces la tensión era demasiado fuerte, y batallaban los egos, pero los nudos los deshacía alguna fuerza muy superior a lo terrenal.
las misiones eran reflejo de la inmundicie humana, el ser revolcándose en excremento por alguna joya. ¿Por qué la vida del contaminado vale menos que de quien no lo esta? ¿El débil debe someterse eternamente ante el fuerte?¿Qué es la fortaleza?¿Y la debilidad? Aunque estemos rodeados de subjetividades, el ser siempre se ocupa de encuadrarlas, anotar una serie de características y exponerlo como única razón, manera o verdad.
Casi nunca lograban rescates,el numero de muertes era mayor, y nadie se sacrificaba por un contaminado.
Pese a que Limbo no ensuciaba sus manos con sangre , su mente estaba cada vez mas oscura, y no sabia que le dolía mas, participar de la masacre o ver a Shasha ensuciándose por el. Porque no era necesario que ella lo dijera para que el lo notase, se conocían lo suficiente como para saber que ella no quería mas pecados para aquel purgatorio.
Pese a todo ella lo negaba y el la reprendía y todo desencadenaba en una nueva batalla.
Era un amor real , paranoico, bullicioso, sin cuerpo, caótico, pero del caos se originaron las cosas mas bellas que el hombre podía observar, y las que no. Y así sucedía también con ellos.
